Orinar en un baño bajo Easy Listening Jazz es como orinar en un elevador.

Si uno sacara la cuenta de todo lo que ha escrito, todos los lugares en los que ha visto desmoronarse el piso bajo el efecto de las drogas, todas las bocas sonriendo que ha besado, todos los niños hediondos cruzados en su camino, todas las imbéciles entradas al Facebook, al Myspace, a los múltiples y polifacéticos blogs de siempre, todos los miedos a la hora de hacer el amor, todas las veces que ha borrado un dibujo malhecho, todas las maldiciones provocadas por una computadora trabada, todos los Manzana Zeta o Control Z de su vida, uno podría dejar de quejarse y pasarse la otra mitad de su existencia en la contemplación del bello mosaico.
Mi foto
1979. Durango. Uno de los mayores exponentes de nada en especial. El jugador más importante en su entorno inmediato. Detractor acérrimo y amante ingenuo de la existencia.